Vivir con Trastorno Dismórfico Corporal (TDC)
¿Qué sucede?
El trastorno dismórfico corporal (TDC) es un trastorno en el cual los pacientes se obsesionan por un percibido defecto de su apariencia. Alrededor de 1% de la población estadounidense padece TDC. TDC ya no se considera un subtipo de TOC. Se clasifica como un trastorno relacionado en la quinta edición del Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales (DSM-5, por sus siglas en inglés).
Es totalmente normal que a las personas le importe como se ven. Muchas veces hacemos cosas para mejorar o cambiarnos, como teñirnos el cabello, arreglarnos las uñas, hacernos un facial, maquillarnos, etc. Esto es normal. Sin embargo, si estás en el espectro de TOC, la obsesión sobre tu apariencia puede ser debilitante. Pacientes frecuentemente sienten una ansiedad severa sobre cada pequeño defecto o característica. Se ven totalmente diferentes que el resto del mundo.
¿Qué es el Trastorno Dismórfico Corporal (TDC)?
Obsesiones comunes de TDC:
- Miedo que todos se estén fijando en tu defecto.
- Miedo que tu cuerpo esté deformado.
- Constantemente pensando en cómo mejorar tu apariencia.
Compulsiones comunes del Trastorno Dismórfico Corporal (TDC):
Evasión.
Dejas de salir a citas, eventos u otros ambientes sociales. Puede que dejes de mirarte en el espejo.
Modificación de dieta.
Cambias lo que comes para evitar el aumento de peso o brotes de acné.
Te tapas excesivamente.
Los hombres se preocupan por el aldegazamiento del cabello y muchas veces se ponen gorros. Las mujeres pueden maquillarse excesivamente.
Consuelo.
Buscar el consuelo de otros.
Confirmar.
Mirarte en el espejo para confirmar que el defecto no haya empeorado.
Conceptos erróneos comunes:
- Hay sólo un tipo de TOC, en general. Subtipos como TDC no existen.
- Personas anoréxicas padecen TDC. En muchos de los casos, esto no es verdad porque el paciente ya ha llegado a una conclusión sobre su peso o apariencia.
- Los pacientes son vanidosos, y los pensamientos sobre su apariencia son totalmente legítimos.
De la comunidad
¿Cómo sé que es TDC?
Todos tenemos pensamientos intrusos, pero tenerlos no quiere decir que tienes un trastorno. Para las personas que sí padecen TDC, estos pensamientos pueden ser debilitantes, causando una ansiedad extrema e incomodidad. Da igual cuanto intentes deshacerte de ellos, no se irán. La diferencia principal entre el TDC y una sana cantidad de vanidad es la gravedad de la ansiedad que una persona siente sobre sus rasgos.
Aunque no esté clasificado como TOC, el TDC está en el espectro de TOC. Normalmente se combina con otra característica de la personalidad o trastorno. En las mujeres, el TDC puede ser asociado con el trastorno límite de la personalidad un trastorno caracterizado por estados de ánimo inestables, comportamiento y relaciones. En los hombres, el TDC puede ser asociado con el narcisismo, un trastorno donde crees ser más importantes que otros. Aprende más aquí sobre los trastornos que ocurren a la vez, también conocido como comorbilidad.
Ejemplos cotidianos:
- Tienes un poro en la nariz que es un poco más grande que los otros. Cuando te miras al espejo, te parece un cráter y piensas que estás deformado.
- Tu cabello empieza a adelgazarse y piensas obsesivamente que todos están mirando tu punto de calvicie. Para evitar la ansiedad, siempre te pones una gorra.
- No estás del todo conforme con tu peso. Sabes que aumentaste unas libras después de entrar en una relación seria. Aunque te sientes saludable, te obsesiones con mirar tu peso en la báscula.
¿Cómo puede ayudar mi familia con mi TDC?
El TDC no es tan complicado como otras formas de TOC. Muchas veces la familia y amigos reconocen la obsesión excesiva que tienen los pacientes con su apariencia. Puede ser un poco más complejo detectarlo en los adolescentes por la presión que sienten a esa edad en mirarse de un cierto modo. El objetivo de la familia y amigos debería ser de animarte a que busques tratamiento profesional y no ofrecerte el consuelo que buscas. Hacer esto puede empeorar el trastorno.
¿Es posible la recuperación para mí?
¡Si! Pero que sepas que el tratamiento puede ser más doloroso que de otros subtipos de TOC porque requiere que mires profundamente tu identidad y apariencia. La terapia de exposición y prevención de la respuesta (EPR) es el tratamiento recomendado para el TDC. La EPR es cuando te expones voluntariamente a la fuente de tu miedo una y otra vez, sin practicar ninguna compulsión para neutralizar o frenar el miedo. El enfrentamiento repetido a la cosa que te da miedo le obliga a tu cerebro a reconocer cuán irracional es.
Ejemplos del tratamiento EPR:
- Puede que al principio te pidan que le preguntes a personas que miren tus defectos y que comenten sobre tu apariencia.
- Luego, puede que tengas que hacer fotos de ti mismo de tal manera que intensifique o agrande el defecto.
También hay otras opciones de tratamiento. Una basada en la concienciación: la terapia cognitivo-conductual, también conocida como la TCC, que les enseña a las personas a identificar, entender y cambiar el patrón y comportamientos del pensamiento negativo. A los pacientes se les enseña las habilidades para resolver problemas durante las lecciones de terapia y después son instruidos a practicarlos a solas para crear hábitos positivos.
¿Puede ayudar la medicación?
La medicación, junto a la EPR puede ayudar, pero no debe remplazarla. Debes siempre consultar con los médicos antes de considerar opciones medicinales.
El grupo principal de medicinas usadas para tratar el TOC son conocidas como inhibidores selectivos de la recaptación de la serotonina, o ISRS. Los ISRS mejoran la actividad natural de serotonina y son utilizadas para tratar graves trastornos depresivos y condiciones de ansiedad. Algunos ejemplos incluyen Lexapro, Prozac, Paxil y Zoloft.
¿Cuál es el objetivo de la terapia?
Some people with BDD recover completely through ERP and CBT. But for many, their obsessions never fully go away. Algunas personas con TDC se recuperan del todo con la EPR. Pero para muchos, sus obsesiones nunca desaparecen del todo. La recuperación de TOC tiene más que ver con la gestión de la condición que con su eliminación. Pero esto no significa que no puedes llevar una vida sana y feliz. Haciendo del tratamiento una prioridad y emplear hábitos positivos de estilo de vida hace que muchas veces los pacientes se sientan seguros y libres. Aunque alguna ansiedad siga presente al final de la terapia, ya no te sentirás debilitado por la condición. Salir de la casa, lucirte con tus amistades o subir fotos online ya no te generará una ansiedad severa. Hay un método más equilibrado en aceptar las diferencias de tu apariencia.